miércoles, octubre 22

hoy

me levanté pensando que llovía. convencida, bah, de que tenía que estar lloviendo. no cabían otras posibilidades como la de que haya llovido a la noche o se pronostiquen chaparrones aislados para las próximas horas. era un conocimiento dogmático que se rehusaba con fervor a segundas interpretaciones, como si el hecho de la lluvia estuviese sosteniendo un sistema de ideas complejísimo que entraría en crisis al menor cambio, ocasionando un efecto dominó, una debacle en todo lo demás, algo que -quizá- no era tan grave, pero no podía aventurarme a averiguarlo.

pero está todo despejadísimo. tanto que ni ian curtis comentando que two-way mirror in the hall, they like to watch everything you do, transmitters hidden in the walls, so, the know everything you say is true. turn it on, don't turn it on, turn it on me resulta lo suficientemente interesante como para contrarestar la ausencia de nubes.


encima, ya se hizo tarde

1 notas al margen.:

Lucas.- dijo...

Hola... bueno.. nada.. vos fijate quien te banca, eh?! Quien sigue.. ahí.. después de tanto tiempo (?)...


Jaja... el mundo está empeñado en contradecirte. Me lo dijo Dios.